Nuestra metodología además de  transmitir conocimientos, contribuye al desarrollo integral de los alumnos atendiendo a sus necesidades afectivas, motrices, sociales, espirituales, etc. 

Así entendida, nuestra pedagogía se convierte en el instrumento para que la educación sea ante todo un proceso de crecimiento y maduración personal potenciando el descubrimiento, la aceptación y la valoración de uno mismo, dotando a los alumnos de un pensamiento autónomo y crítico.